El equipo del CEIT vivimos el pasado jueves 21 de abril un magnífico día de deporte y hermanamiento participando en la 3ª Carrera del INTA. Más de cuatrocientos participantes, trabajadores y familiares del INTA esperaban nerviosos y espectantes en la línea de salida, cuando a las 12h se lanzó el cohete simbólico que marcaba el inicio de la carrera y que nos recordaba a los lanzamientos de nuestras misiones espaciales.
Con una distancia de 10Km, se trata de una prueba exigente, que cubre parte de los caminos limítrofes de nuestro Instituto, la denominada Tapia del INTA (por su similitud por la famosa Tapia de la Casa de Campo, un recorrido muy frecuentado por los corredores madrileños), que permite conocer puntos naturales de gran belleza del Instituto: sus famosos pinares y lagunas.
El CEIT al completo nos involucramos en la carrera, participando 17 corredores; además, los compañeros que no pudieron participar en la carrera prepararon un maravillosa mesa de avituallamiento para agasajar a los acalorados y cansados corredores que tendrían que pasar en el kilómetro 7 frente al CEIT.
Todos los participantes cruzamos felices la línea de meta y entre abrazos y comentarios de las sensaciones dimos buena cuenta del aperitivo y paella preparado para celebrar la ocasión. Compartimos con vosotros algunas de las reflexiones que surgieron aún vestidos de corto y con nuestras brillando sonrojadas por el esfuerzo:
"Algunos hicimos la carrera andando. Al no haber habido preparación previa, decidimos participar de alguna manera y tomamos la determinación de hacerla caminando. Pero no fue una caminata de paseo ¡no!, sino que lo hicimos a un buen ritmo (10km en 1h y media). Y esta experiencia ha sido buena, pues nos esforzamos al no bajar el ritmo y además fue divertida: no paramos de hablar (contando batallitas del trabajo y de nuestra vida personal), admiramos lugares bucólicos del INTA que desconocíamos (como la zona del laguna), nos reímos con las historias que contaban los corredores a nuestro alrededor, y con la imaginación de la gente a la hora de animar a los participantes"
"El pasado 21 de abril fue uno de esos días especiales que siempre recordaré con cariño. Por dos motivos, porque es el cumpleaños de mi madre, uno de los pilares de mi vida y porque pasamos una mañana maravillosa en la que el sol nos acompañó todo el recorrido. Para mí lo bonito de la carrera no es el hecho de correr (aunque lo tengo apuntado en mi lista de logros personales), sino compartir este acontecimiento con todos mis compañeros, los que corrieron, los que nos animaron y los que finalmente no se decidieron a participar. ¡Va por ellos!"
Felicitamos al INTA por mantener esta jornada que permite darle importancia a valores tan clave en el trabajo como son el compañerismo, la capacidad de superación y la cultura del esfuerzo.
Ya estamos desesos de participar en la siguiente edición y animamos a todos los compañeros a que participen el próximo año ¿Cuándo empezamos el entrenamiento?